JUGANDO AL TURMEQUÉ

Herencia Muisca, Historia, Patrimonio Cultural y Deporte Nacional.

JUEGO AL TURMEQUÉ, NUESTRO DEPORTE NACIONAL

El Turmequé, Tejo o lanzamiento parabólico, es uno de los deportes autóctonos más practicados del país, su cuna, es el Municipio de Turmequé en el departamento de Boyacá, la Tierra de don Diego de Torres, Villa Republicana, Monumento Nacional y Bien de Interés Cultural.

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Este deporte autóctono, es una herencia del Cacique Turmequé, Pueblo Muisca que habitaba el Altiplano Cundiboyacense. Para ellos, su práctica se centraba en lo religioso, era un tributo a sus dioses tutelares, donde el Turmequé representaba el movimiento de la luna y el sol, de igual manera representaba un método amigable para la solución de cualquier diferencia y un pasatiempo en las extenuantes jornadas de desplazamiento, entre un territorio y otro.

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Durante el periodo Colonial y Republicano, el Turmequé, varia de una práctica religiosa a un juego, donde poco a poco evoluciona, a lo que conocemos hoy. Se incorpora la mecha, la caja de greda, el bocín metálico, remplazando los canutos de guadua y los tejos de piedra son remplazos por elementos de metal y acero.

Esta manifestación cultural y deportiva a raíz de su expansión, en 1954 es aceptado como deporte autóctono oficial en los Juegos Atléticos Nacionales. En 1956 se crea la Federación Colombiana de Tejo. En 1969, es reconocido como deporte básico. En el 2000, se declara Deporte Nacional de Colombia, mediante la Ley 613 y en el 2019 es declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación, mediante la Ley 1947.

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Su práctica consiste en lanzar un disco metálico “Tejo”, entre canchas ubicadas a cada costado, con el propósito de lograr la mejor puntuación, donde, durante su práctica se logra una experiencia inigualable, actividad física y una práctica que permite construir historias, logrando el buen provecho del tiempo libre

Las cuatro jugadas más importantes son; la Mano (un punto), la Mecha (tres puntos), el Bocín (seis puntos) y la Moñona (nueve puntos). Las distancias o modalidades de canchas más comunes son; el Mini-tejo (8 metros), Poni-tejo (12 metros) y el Tejo largo (19.5 Metros).

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Practicado por grandes personalidades del ámbito nacional, como Jorge Eliécer Gaitán y Julio Cesar Turbay Ayala, este pasatiempo, elemento integrador y comunitario, ha logrado un gran auge, siendo practicado internacionalmente, en países de América y Europa, siendo uno de los símbolos de nuestro departamento y del país, emblema del Valle de las Trompetas, nombre con el cual también se conoce el municipio de donde es originario.

En torno a esta manifestación, el municipio de Turmequé, su cuna, en 1992 construyo el Coliseo del Juego al Turmequé y en el 2002, se instaló en el Parque Principal Diego de Torres, el monumento del Juego al Turmequé, una estructura, de más de 15 metros de altura, elaborada a partir de utensilios propios de la región “chatarra”, monumento que se convirtió en portada e icono municipal, de este deporte, así como Postal obligado para todo visitante.

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De igual manera se adelantan festivales, campeonatos locales, regionales y nacionales, estrategias de divulgación, murales, videos, notas audiovisuales, entre otras, en pro de conmemorar, salvaguardar y celebrar su tradición. El Turmequé, es el mayor legado para los habitantes de este municipio y hace parte de sus símbolos patrios, como lo son Bandera y Escudo.

El Juego al Turmequé, está compuesto por una diversidad de elementos culturales, deportivos, administrativos, socioeconómicos, turísticos, entre otros, que hacen de esta manifestación, nuestro orgullo y nuestra insignia deportiva a nivel nacional e internacional.

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Ven a practicarlo, porque no hay como jugar al Turmequé en la tierra que lo víó nacer, Turmequé Boyacá.